Según los estudios de Coface, India se diferencia de China en las ventas a crédito
Coface, el grupo francés líder en seguros de crédito y servicios financieros, dio a conocer los resultados de sus estudios sobre la gestión del riesgo de crédito de las empresas en China e India. Este estudio comparativo recopila los resultados del sexto estudio realizado en China y de la primera edición del mismo estudio efectuado en India. Ambos fueron realizados entre septiembre y diciembre de 2008 sobre 556 empresas implantadas en China continental y 694 empresas indias.
Los resultados demuestran que los pagos a crédito, casi inexistentes hace 10 años, son ahora una práctica habitual en el comportamiento de pago de las empresas de ambos países. La mayoría de las empresas en China e India venden a crédito (65% y 72% respectivamente). Los dos países adoptan progresivamente los estándares internacionales en la materia y se observa una tendencia a la generalización de esta práctica con un incremento del 11% del uso de la venta a crédito en China respecto a la anterior edición del estudio. En India, una de cada tres empresas incluidas en el estudio declara haber incrementado la proporción de sus ventas a crédito en los últimos 12 meses. En China, este desarrollo se debe a los problemas de tesorería de los compradores, mientras que en India, se trata más bien de una práctica comercial en un marco competitivo. Los plazos de pago habituales son más largos en China (60 días de media) que en India (30 días).
Sin embargo, el uso de plazos de pago cada vez más largos plantea la pregunta de hasta qué punto las condiciones de pago están bajo control. Tanto en China como en India, la casi totalidad de las empresas sondeadas registra retrasos de pago. Los plazos de pago contractuales se sobrepasan con frecuencia, sobre todo en China, donde los sectores con sobrecapacidad y las industrias con bajo valor agregado siguen enfrentándose a dificultades financieras. En India no obstante, las facturas suelen pagarse en los 30 días después del vencimiento, mientras que en China, el 75% de los retrasos exceden los 30 días después de la fecha límite de pago.
Según el estudio, los dos países parecen haber conseguido limitar el impacto de la crisis. El crecimiento seguirá siendo elevado en 2009 en China (alrededor del 7%), pero se están implementando importantes cambios y para enfrentarse a la crisis, el país quiere centrarse en sectores de alta gama. Algunos sectores, sobre todo los de bajo valor agregado (textil, calzado, juguete) y los que tienen sobrecapacidades (automóvil, construcción, siderurgia) reducirán el número de actores y concentrarán la mayor parte de los riesgos de impago.
Por otro lado, el crecimiento indio es más equilibrado y ya se perciben señales de mejora (crecimiento del 5,8% en el primer trimestre 2009 frente al 5,1% en el cuarto trimestre 2008), por lo que el nivel de los impagados debería mantenerse relativamente estable. Se observa, no obstante, que las empresas recurren más a la financiación externa, y podrían verse afectadas por una escasez prolongada del crédito en los mercados financieros internacionales. En caso de una nueva crisis, los retrasos de pago podrían aumentar.
De esta manera, frente a un impago, las empresas chinas dan prioridad siempre al recobro amistoso mientras que las empresas indias pueden contar con un clima empresarial más fiable y por lo tanto, recurren masivamente al recobro judicial.
“Se trata de la primera edición de nuestro estudio en India, y la sexta en China” recuerda Yves Zlotowski, Chief Economist de Coface. “La notable resistencia de esas economías a la crisis en materia de crecimiento no significa que no haya riesgo de impago, sobre todo en el sector privado chino, siempre bajo tensión”.