LA CAMARA ARGENTINA DE ASEGURADORAS DE RIESGO AMBIENTAL EN EL DIA UNIVERSAL DEL MEDIOAMBIENTE
El concepto de medioambiente abarca desde el aire que respiramos, el agua que bebemos y con la que nos higienizamos, los alimentos que ingerimos, los paisajes que contemplamos, los materiales con los que estamos en contacto. Asimismo, la importancia del medio ambiente se resalta con la cooperación internacional que existe en la materia.
En esta noción están en juego el bienestar y la salud del presente y del futuro de la humanidad, afirmación que tiene cada día mayor fundamento desde que la evolución del conocimiento determina que hoy el hombre, con su accionar, puede hacerle tanto más daño como brindarle tanto más beneficio al medioambiente.
Beneficiarlo es un acto de conciencia cuya consecuencia será perceptible sólo si fuera el resultado de una acción que comprometa a las mayorías. Dañarlo no es sólo una irresponsabilidad, es también un delito que en una sociedad puede cometerlo uno, pero las víctimas, indefectiblemente, serán todos.
Todos tenemos obligaciones con el medioambiente. Las autoridades tienen el deber de legislar, reglamentar, cuidar y controlar su cuidado con el mayor rigor. Asimismo, tienen la obligación de castigar las violaciones con igual rigor. Las personas, jurídicas y físicas, tienen la obligación de preservarlo y de cumplir las leyes y reglamentaciones dictadas con ese fin.
En su Bicentenario, que acabamos de celebrar con alborozo, la República Argentina puede enorgullecerse de tener una política de Estado referida al medioambiente resultado del mandato de la Constitución Nacional reformada en 1994 y de un amplio consenso en el Congreso de la Nación, que dio origen a la Ley 25.675 (Ley General de Ambiente).
En consecuencia, la oportunidad de recordar el Día Universal del Medioambiente debe servir para la reflexión y la toma de conciencia. El andamiaje legal ya está. No es materia discutible, sino en los ámbitos correspondientes. No es una etapa de cuestionamientos o confrontaciones, sino de actitudes responsables. Si las autoridades y las personas no lo cumplen, el deterioro del medioambiente –la contaminación- no perdonará.
Por fin, la cuestión es tan sencilla como profunda a la vez: el medioambiente es un bien que sólo podemos disfrutar o padecer. Y la decisión es de todos, empezando por cada uno.
Roxana Fernández Núñez, Directora Ejecutiva
Roberto Luis López, Secretario
Jorge Edgardo Furlan, Presidente
