Coface anuncia un incremento en los riesgos globales debido a la inestabilidad política en ciertos países y a los últimos desastres naturales
Coface, el grupo francés líder en seguros de crédito, anunció que después del punto de inflexión que supuso el 2009, con caídas en el crecimiento económico de tres cuartas partes del mundo, el 2010 ofreció unas tasas globales fuertes y sólidas de un 4%. Con ello, los analistas pensaron que la crisis en forma de doble v se había evitado. Para 2011, se espera un crecimiento mundial más moderado (3,2%) en el que siguen existiendo riesgos, entre los que se destacan:
El comportamiento de los países emergentes, que han salido reforzados de la crisis, pero donde diversas burbujas (cambiarias o de materias primas) siguen muy presentes.
El comportamiento del consumidor norteamericano, que supone un 18% del total mundial frente al 15% de los europeos o al 3% de los chinos. Tras el aumento de desempleo que ha sufrido Estados Unidos, hay que observar detenidamente el comportamiento de la demanda interna y su evolución.
El futuro de la euro zona, debilitada por la crisis de la deuda soberana. La evolución de la deuda griega y su impacto en el sistema financiero del viejo continente.
Entre las modificaciones de calificación más recientes cabe destacar:
Debido a los recientes desastres naturales en Japón, Coface ha modificado la calificación del país a A1 con perspectiva negativa, con un crecimiento del PBI previsto para 2011 del 0,3% frente al rebote del 3,9% del año anterior.
La zona euro ha sido golpeada severamente por diversas crisis de deuda soberana y se espera un crecimiento económico del 1,3% en el 2011, frente al 1,8% de 2010. Coface ha mantenido la mayor parte de las calificaciones de la eurozona, con la excepción de Portugal (rebajado a A4) y Chipre, rebajado a A3 debido a su gran exposición a la deuda griega.
Debido a las incertidumbres creadas en el norte de África desde diciembre del 2010 en Túnez, Coface ha rebajado la calificación de este país (A4 con vigilancia negativa) y de Egipto (B), ya que las transiciones políticas que deben acometer las hace frágiles económicamente en el corto plazo. Otros dos destinos de la zona han visto su calificación rebajada: Siria (C con vigilancia negativa), debido al aumento de las protestas sociales y a la mayor dificultad para el desarrollo económico, y Libia, donde la situación bélica actual ha supuesto una caída de, al menos, el 15% de la actividad económica (calificación actual D).
Tras un año marcado por la recuperación, Coface observa un incremento en los riesgos globales debido al aumento de la inestabilidad política en algunos países y a los desastres naturales del primer cuatrimestre de 2011.
Asimismo, aunque este cambio de tendencia está afectando también a los países emergentes, la recuperación mundial se mantiene pero a un ritmo más lento.