Disminución del crecimiento económico de la región, pronostica FELABAN
La incertidumbre económica y financiera originada en la crisis y la indefinición en el monto del fondo de rescate de la deuda europea, el lento ritmo de crecimiento económico de USA, el estancamiento japonés, sumados a una reducción del crecimiento de China, propiciarán que durante el año 2012 el crecimiento económico de América Latina se reduzca. Mientras que en el año 2010 el PIB regional creció un 5.9%, en el año 2011 las estimaciones muestran que alcanzará el 3.7%.
Este menor crecimiento puede darse, de un lado, por el menor precio de los bienes básicos exportables, así como por una menor demanda mundial por bienes, lo que golpearía el sector externo. Ante las dificultades de las economías desarrolladas, también existen probabilidades de que los flujos de inversión extranjera disminuyan, tanto como los flujos de remesas de los trabajadores y la inversión de portafolio. Adicionalmente, en la medida en que la situación adversa se profundice, es posible que los canales de financiación externa tiendan a estrecharse, tanto para gobiernos como para instituciones bancarias del continente. Asimismo, ante una mayor percepción de riesgo financiero, los inversionistas globales podrían reducir su demanda por activos financieros en los mercados emergentes. Estos factores pueden afectar la inversión privada en los países y, con ello, se afectaría el crecimiento económico.
La banca latinoamericana ha pasado la turbulencia financiera sin que se presenten problemas de financiación, liquidez. Prácticamente, en ningún caso el sistema bancario es objeto de preocupación para los gobiernos, bien sea por la vía de capitalizaciones que afecten al presupuesto público o por exposición de riesgo que la banca expresa en su hoja de balance.
Un informe del Banco Mundial menciona que los aspectos estructurales de la banca latinoamericana pueden explicarse en la conjunción de varios factores dentro de los que se tienen: a) una sólida posición macroeconómica; b) permitir una liberalización financiera que facilite la acción de los mercados; c) la calidad de la supervisión ha aumentado y ha convergido hacia los estándares de Basilea; d) el desarrollo de una política pública que promueva el mayor acceso a los servicios financieros.
En ese orden de ideas, los efectos de la crisis financiera internacional seguramente llevarán el crecimiento del PIB regional a niveles que oscilen entre el 3.7% según Naciones Unidas y el 3.6% recientemente pronosticado por el FMI. En Latinoamérica el crecimiento económico viene mostrándose vigoroso y las variables financieras han sido altamente dinámicas en los últimos años.
Durante el año 2012 se espera que fruto de la desaceleración de la demanda mundial, el precio de los bienes básicos se reduzca, con lo cual se tendrán efectos adversos en las exportaciones y en los volúmenes exportados. Hechos como las tensiones entre Estados Unidos e Irán pueden ser factores puntuales que impidan una caída de productos puntuales como el petróleo.
Lo positivo
La moderación del crecimiento se verá contrarrestada, de otra parte, por una positiva posición de reservas internacionales de la región (US$ 780 mil millones); un bajo desempleo urbano (6.3%) y unos índices de pobreza del 30.4% de la población (los más bajos de últimos 20 años). Igualmente, en la actualidad se presenta un crédito de consumo dinámico que crece por encima del 11% anual a nivel agregado.
Para FELABAN es fundamental que los gobiernos de la región estén preparados desde el punto de vista de la política fiscal para realizar inversión pública que tenga alto impacto en la producción y el empleo. Es crucial que la estructura de ingresos y gastos públicos sea adecuada para que los gobiernos de la región compensen los efectos adversos de una posible recesión mundial y se aproveche para invertir en temas que profundicen la competitividad regional. Gasto en temas tales como infraestructura física, acceso a servicios públicos, eficiencia de los sistemas judiciales, son aspectos que pueden marcar la diferencia en una situación de turbulencia financiera.
Igualmente, con el fin aumentar la competitividad y mejorar el entorno de negocios, es importante que se simplifiquen los sistemas tributarios; garantías para el complimiento de los contratos y facilidad para la formación de nuevos negocios, son aspectos que, a juicio de FELABAN, constituyen un principio para sentar las bases de crecimiento económico de largo plazo.