SEGUROS AGRÍCOLAS, más vale tarde que nunca…

Por segurosaldia.com febrero 13, 2015 08:00 Actualizado

Enero 2015…….

–       Inundaciones en campos de Sante Fé. Las abundantes lluvias en dos meses igualaron el promedio anual de los últimos años.

–       Granizo en la localidad de Campo Grande y zonas aledañas, Río Negro. Más de 2500 hectáreas resultaron dañadas, muy pocos productores con seguro.

–       Caída de granizo en Rosario de Verma y Campo Quijano, Provincia de Salta. Más de 1200 hectáreas de tabaco afectadas.

–       Abundantes lluvias y granizo azotan la Provincia de San Luis. Más de 200 mm de precipitaciones en sólo 25 días.

–       Inundaciones y granizo en la Provincia de Córdoba (Río Cuarto, Marcos Juarez, Calamuchita, Gral San Martín, entre otras), se perdieron 38.500 hectáreas de maíz y 206.000 hectáreas de soja.

Y estos son algunos ejemplos, de los fenómenos climáticos ocurridos tan sólo en un mes de lo que va del año. A pesar de ello, sigue dudando en contratar un seguro sobre su campo??

En la actualidad de 33 millones de hectáreas cultivadas, tan sólo 21 millones están aseguradas, lo que representa un porcentaje del 63%. La sequía es la primer causa de pérdida de cultivos aunque pocos productores están dispuestos a contratar esta cobertura.

Los fenómenos climáticos que afectan a todo el país, son cada vez más impredecibles y de magnitudes cada vez mayores. Si a ello le agregamos el difícil momento que está atravesando el sector agropecuario, obtenemos una mezcla que torna en muchos casos inviable la explotación de ciertas zonas y de determinadas producciones.

El productor invierte cada vez más dinero para poder sembrar y necesita un respaldo para recuperar al menos su inversión. Hoy en día no contar con un seguro puede representar no sólo no recuperar el dinero invertido, sino aún más, el fin de una trayectoria como productor agropecuario.

La demanda de seguros de riesgo agrícola tiene su estacionalidad. Normalmente, para lo que es cosecha fina, en julio ya comienza a manifestarse el interés de los productores. Pero la mayor demanda comienza entre septiembre y noviembre, y se extiende hasta fines de enero, que son los momentos de mayores tormentas.

El seguro agrícola cubre ciertos riesgos climáticos y/o biológicos, es decir, aquellos fenómenos que afectan al rendimiento, la calidad o la supervivencia del cultivo en forma verificable. Sin embargo, gran cantidad de productores agrícolas no cuenta con un respaldo para su cosecha en caso de acaecimiento de un evento que afecte a la misma y este fenómeno se debe a distintas razones:

–       Cultural, el productor argentino no ha desarrollado una conciencia de limitación de riesgo. El seguro es considerado como un costo y no con una inversión.

–       Falta de publicidad, que posibilite el conocimiento de las distintas opciones de cobertura, sus ventajas, etc.

–       Márgenes agropecuarios estrechos: la apremiante situación por la que transita el sector, obliga a reducir los costos al mínimo posible, y lo primero que se reduce es el costo del seguro.

–       Alto riesgo que deben asumir las aseguradoras, atento que los reaseguradores se hacen cargo sólo de un pequeño porcentaje del riesgo y en algunos casos directamente no lo afrontan.

Las actividades agropecuarias de por sí están vinculadas a los fenómenos naturales y es sabido que tanto la variabilidad climática como así también el constante aumento de los precios, constituyen los principales elementos de incertidumbre, transformando estas actividades en inversiones de alto riesgo. Es por ello que el productor necesita contar con un respaldo para poder llevar adelante su producción al menos con cierto grado de tranquilidad de que recuperará lo invertido. Ello se logra a través de la combinación de tres elementos fundamentales como son una ley de emergencia agropecuaria, la instrumentación de políticas de seguros privados y la creación de un fondo permanente para hacer frente a las grandes catástrofes que no estén amparadas por el seguro. Por ello es importante que exista una conciencia aseguradora sumado a una diversidad de opciones de seguros agrícolas que acompañen el desarrollo del productor agropecuario, sumado a la participación estatal, a través de políticas de promoción con el fin de que el productor adhiera masivamente a un seguro, utilizándolo como una herramienta para limitar el riesgo.

Dra. Gabriela Melina Alvarez

Gabriela.alvarez@segurosaldia.com

Por segurosaldia.com febrero 13, 2015 08:00 Actualizado