Más allá del auto o una casa, la posibilidad de asegurar distintos tipos de bienes tomó un mayor protagonismo en el último tiempo. Así es que tanto empresas del sector como bancos ofrecen coberturas para bicicletas, monopatines o celulares. También, por ejemplo, existe la opción de asegurar una cartera o una mochila.
Una de las características principales de este tipo de seguro es que las compañías ofrecen asistencia y cubren los gastos en caso de robo o hurto de las pertenencias del cliente, ya sea para hacer nuevos juegos de llave, como para solicitar documentos o tarjetas.
Además, claro, de cubrir distintos bienes que se lleven en la cartera o mochila, como los dispositivos electrónicos o anteojos recetados. En algunos casos también cubren, hasta cierto monto, sumas de dinero en efectivo. Lógicamente, el monto total dependerá del tipo de plan elegido.
Asegurar una cartera o mochila cuesta entre $260 y $650
Las compañías aseguradoras y los bancos ofrecen distintos niveles de planes, desde uno «básico» hasta otro «Premium». Y la diferencia radica, principalmente, en el tope del monto asegurado.
Por ejemplo, un banco privado ofrece planes desde $326 hasta $650 por mes y cubre, entre otras cosas, el reembolso de gastos de documento y llaves (por hasta $3.300, dependiendo el plan); el robo del bolso y su contenido, con una suma asegurada de hasta $10.000; el robo de dinero en efectivo (hasta $6.400) y el robo o daño de dispositivos electrónicos (por hasta 24.600 pesos).
Otro banco, en tanto, ofrece un servicio similar e incluye a los celulares en caso de robo de la cartera o la mochila, también con un límite según la suma asegurada. Además, también facilita la «reobtención» de llaves, documentos y tarjetas perdidas.
Una fintech, por su parte, ofrece tres tipos de planes (Básico, Completo y Premium), con precios que van de los $260 hasta los $420. El más alto, cubre bienes robados por hasta 35.400 pesos.
En tanto, una empresa aseguradora «tradicional» ofrece planes que rondan los $300 por mes, con una suma asegurada de hasta $24.800. Cubre, entre otras cosas, hasta $5.500 por robo de anteojos, hasta $3.000 por cosméticos y hasta $4.000 por robo de DNI, pasaporte, licencia de conducir y llaves.
Seguro de carteras: qué otras cosas tener en cuenta
Además de variar en los montos asegurados, cada empresa brinda diferentes servicios para sus clientes. En muchos casos, ofrecen asistencia médica en caso de lesiones durante el robo de la cartera o la mochila.
Por caso, un banco ofrece «asesoramiento legal«, vía telefónica, para realizar la denuncia de robo de documentos personales. Otro, en tanto, pone a disposición del cliente un taxi o un remis para ir a la comisaría más cercana a hacer la denuncia, con el posterior traslado al domicilio.
También suele aclararse que el ámbito de cobertura es en la vía pública y sólo dentro del territorio de la República Argentina. Además, el ajuste de la suma asegurada se realiza de manera automática «en cada renovación anual».
Otro aspecto que suelen destacar las compañías es que este tipo de seguro cubre hasta «dos eventos por año»: es decir, dos robos o hurtos en ese lapso de tiempo. Y, en la mayoría de los casos, en el segundo hecho se cubre «hasta el 50% de la suma asegurada».
Es así que, ya sea luego de vivir una mala experiencia, o simplemente por precaución, son muchos los que utilizan este tipo de seguro para andar con mayor tranquilidad en la vía pública. Es que, si bien son varias las cláusulas y condiciones que hay que tener en cuenta, hay un amplio abanico de posibilidades para contratar el tipo de seguro que mejor se adapte a cada persona.
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