Los desastres naturales se convierten en el principal factor de riesgo para la estabilidad de la industria de seguros en México y el mundo, señaló José Antonio Ruibal, director de suscripción de mercados globales para Mapfre Global Risks.

Apuntó que en los últimos años se observó un incremento en el número de inundaciones, granizadas, huracanes, mismos que incluso se están presentando en zonas donde antes no pasaban catástrofes.

“Para las empresas del sector es una oportunidad pero que se puede convertir en un peligro también, ya que hay que medir muy bien cuál es la exposición que tenemos porque se dan variables que antes no existían”, agregó el directivo.

Información de la Asociación Mexicana de Instituciones de Seguros (AMIS), mostró que 55 por ciento de los seguros contratados en México es contra riesgos hidrometeorológicos.

Y datos al cierre de 2023 señalaron que las aseguradoras cubrieron 42 por ciento de los daños causados por huracanes, siendo el fenómeno natural con mayor frecuencia de incidencia en el país.

Por otro lado destacó que uno de los inmuebles más afectados son los localizados en zonas costeras con alta incidencia de tormentas tropicales, donde señaló que existe una gran concentración poblacional, como el caso de Acapulco.

“También estamos viendo mayores siniestros, mayores afectaciones por este tipo de eventos en nuestra cartera asegurada, al final estamos viendo que hay más concentración de personas en zonas que están sujetas a este tipo de eventos y fenómenos naturales”.

“Entonces a lo mejor los eventos son los mismos, huracanes ha habido siempre, pero lo que pasa es que ahora tenemos más sumas aseguradas, más capitales, más inversiones en zonas afectadas por huracanes”, dijo.

El directivo apuntó que continuará asegurando a los clientes que se encuentren en zonas de riesgo, pero agregó que las aseguradoras tendrán que fortalecer sus relaciones con las compañías de reaseguro a fin de contar con capital para solventar estos desastres naturales.